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martes, 18 de marzo de 2014

Raika a puro látigo


1 comentario:

  1. Mi nombre es Lorena, tengo 32 años, soy la capitana del equipo de baloncesto de mi ciudad, y la temporada pasada tras acumular 9 partidos seguidos perdiendo destituyeron al entrenador y trajeron a un nuevo entrenador, Lucas, 40 años, 1,90 de altura y que esta como un queso, aunque para nuestra desgracia todo lo que tiene de guapo lo tiene de estricto.

    Llevábamos un par par de meses a sus ordenes, y de los 8 partidos que habíamos jugado solo habíamos perdido 1, y eso le costó una dura azotaina a una de las compañeras por cometer varios fallos durante él encuentro.

    Un día antes de un partido conseguí que Lucas aceptara tener una cita conmigo esa noche, pero durante él encuentro tras una jugada polémica me encare con la arbitro y la llame "hija de puta" llegando a empujarla, lo que me costó la expulsión. Tras él partido Lucas me llamó a su despacho, cuando entré me esperaba lo peor:

    -lo que ha pasado ahí fuera ha sido una vergüenza, y mas siendo la capitana, has dejado la imagen del club por los suelos

    -lo siento mucho míster...

    -ahora si que lo vas a sentir de verdad, ven y tumbate sobre mis rodillas

    -por favor míster, te romero que no volverá a pasar

    -de eso me voy a encargar yo ahora mismo, ponte ya si no quieres que me cabree mas de lo que estoy

    Le hice caso y me puse sobre sus rodillas recibiendo una pequeña azotaina con su mano, que la interrumpió para decirme:

    -vamos levantate y bajate él pantalón a la altura de las rodillas

    No quería enfadarlo mas por lo que me levanté e seguida, pero cuando estaba decidida a bajarme él pantalón me di cuenta que ese pantalón estaba compuesto por 2 piezas por lo que no llevaba bragas puestas, así que me quedé parada.

    -vamos, a que esperas? Bajate él pantalón ya

    -es que no llevo nada debajo

    -no te he preguntado si llevas algo debajo, bajatelo ya

    -no, por favor

    Me pegó un tirón del pantalón y me volvió a poner sobre sus rodillas dándome otra vez una azotaina con La mano sobre mis nalgas desnudas dejandomelas de un color rojo intenso, hasta que unos minutos mas tarde volvió a parar y me dijo

    -corre al cajón de mi escritorio, traeme una pala de madera subete él pantalón y apoyate en él escritorio

    -como una pala?

    -traemela inmediatamente

    -sisi voy

    Cogí la pala se la entregue en la mano y me apoyé sobre él escritorio pero olvidé subirme él pantalón

    -a ver Lorena, yo no tengo ningún problema en azotarte así, pero será mejor si me haces caso y te subes él pantalón

    Me subí él pantalón inmediatamente muy avergonzada

    -serán 12 golpes, 10 por tu mal comportamiento y 2 por haber tenido que bajarte yo él pantalón de acuerdo?

    -si

    -vale pues allá vamos

    Recibí todos los azotes, y acabe llorando como una niña pequeña

    -venga ya esta, tranquila

    -lo siento mucho Lucas, mi comportamiento ha dejado mucho como desear

    -te has comportado fatal, pero no pasa nada, espero que esta noche cuando vayamos a cenar me lo recompenses

    -seguro que si—le dije con una sonrisa picarona—.

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